CONTRA EL DINERO Y EL PODER, LA RAZÓN DEL PUEBLO
Aquí, en la calle, nuestro verdadero
Parlamento, estamos otra vez diciendo ¡NO! al desarrollo insostenible
propiciado por los sectores económicos y políticos, que desgobiernan Canarias,
pensando sólo en sus beneficios y despreciando los legítimos intereses
populares.
Durante más de veinte años,
desde que asumió las plenas competencias para la ordenación y gestión del territorio,
Canarias desarrolló una legislación del suelo que buscaba implantar un
modelo territorial más cohesionado, próspero y sostenible, para una sociedad y
una economía más justas y solidarias. Este proceso culminó con las
Directrices de Ordenación, aprobadas por unanimidad por el Parlamento de
Canarias el 14 de abril de 2003.
Sin embargo, en la práctica, los intereses de los
grandes propietarios, unidos a los de una
élite política corrupta y clientelar, gestaron bajo la pauta de la construcción
y el pelotazo inmobiliario, un modelo de crecimiento económico y acumulación de
capital, cuyas principales características fueron las burbujas inmobiliarias,
el endeudamiento privado, la construcción de innecesarias y faraónicas
infraestructuras, la especulación del suelo y la consiguiente desigualdad
social.
UN MODELO AGOTADO.- Pero el estallido de la crisis económico-financiera
desarticuló esa red de intereses en medio de un tsunami de corrupción
institucional, con más del 40 por ciento de los ayuntamientos –35 de los 88
existentes en Canarias– afectados por delitos urbanísticos, entre ellos el
“pelotazo de libro” de Las Teresitas, en Santa Cruz de Tenerife.
El modelo de acumulación de capital se ha agotado y
con él han perdido legitimidad social los
partidos y personas (algunas de ellas sometidas hoy a procesos judiciales), que
han gobernado y dirigido nuestra Comunidad durante los últimos cuarenta años. A
la crisis económica se une una crisis de régimen.
Los sectores dominantes –empresarios, políticos y medios
de comunicación subsidiados–, pretenden
resolver esta crisis a su favor y, al mismo tiempo que siguen exigiendo a los
poderes públicos nuevas medidas de carácter neoliberal (pérdida de derechos e
incremento de la explotación laboral, recortes sociales y privatización de
servicios públicos), demandan la mercantilización del suelo, la concepción del
Archipiélago como un solar para negociar, especular y enriquecerse aún más, a
costa de la destrucción del territorio, que es patrimonio común de todos los
canarios y canarias.
Este es el objetivo real de la Ley del Suelo, el
llamado “proyecto estrella” del presidente
Clavijo, cuyo contenido obedece fundamentalmente a los intereses de las Cámaras
de Comercio del Archipiélago y de las patronales de ambas provincias,
CEOE-Tenerife y Confederación Canaria de Empresarios de Las Palmas.
RENOVACIÓN DEL PACTO.- El proyecto de ley que se tramita en el Parlamento autonómico
no es sino una renovación del viejo pacto político-empresarial puesto en marcha
por los principales empresarios de las Islas y los partidos del régimen
(Coalición Canaria, PP y PSOE) desde los primeros años de la transición. Hace
algunas concesiones destinadas a ganar voluntades entre los pequeños
propietarios agrarios y otros sectores no pertenecientes a las élites y
reincide en viejas mentiras como el demagógico y falso argumento de la creación
de empleo.
EFECTOS DEVASTADORES.- No nos cansaremos de denunciarlo: El proyecto de Ley
del Suelo es una iniciativa neoliberal y regresiva, que tendrá efectos
devastadores para el futuro del territorio y los recursos naturales de Canarias.
Responde básicamente a los intereses de los grandes empresarios del cemento e insiste
en el mismo modelo de desarrollo que nos ha conducido a la situación de
emergencia social que hoy estamos sufriendo, con un 26 por ciento de paro (el
mayor del Estado, después de Andalucía), con sueldos de miseria los que podemos
trabajar y con más de la cuarta parte de la población sumida en la pobreza, el desamparo
y la marginación social.
POR UN
TERRITORIO SOSTENIBLE.- Por eso reclamamos hoy, con más firmeza que nunca, un territorio sostenible
para Canarias, basado en sus recursos naturales y culturales como fuente de
riqueza. Por eso denunciamos y rechazamos la apuesta neoliberal por reproducir
la burbuja inmobiliaria, que provocó la crisis. Por eso exigimos el derecho a
analizar seriamente, con la más amplia participación ciudadana, los problemas de
la gestión del territorio canario, tras el crecimiento urbanístico y
edificatorio acelerado, sufrido entre el final del siglo XX y el comienzo del
XXI. Por eso
hemos creado la Plataforma Canarias por un Territorio Sostenible, como una
herramienta colectiva para facilitar la convergencia y la acción de quienes
somos conscientes de que la tierra es nuestro mayor recurso, que pertenece a
las generaciones futuras y que desde esta perspectiva hay que usarla y
conservarla.
EJEMPLO DE
DESGOBIERNO.- El proyecto de Ley del Suelo es un
ejemplo más del desgobierno que desde hace
décadas estamos sufriendo en Canarias. Los señores del piche y del cemento no
se paran en nada para llevar a cabo sus desmanes. Cambiaron las normas de
protección ambiental para realizar el puerto de Granadilla, expoliaron
viviendas y fincas para construir el inconcluso Anillo Insular, causaron un desastre ecológico en los barrancos de
Güímar, tratan de eludir por todos los medios la sentencia de derribo del “mamotreto”
de Las Teresitas. Los dueños del dinero, de las excavadoras, de los periódicos
y de las televisiones quieren ser también los dueños de la ley, para seguir realizando, ahora sin riesgo de
acabar ante un tribunal, sus prácticas corruptas de acumulación de riqueza.
NO NOS PARARÁN.- Compañeras y compañeros: Sólo la resistencia y la
lucha podrán frenar sus desafueros. Por
eso estamos otra vez en la calle, que es nuestro Parlamento, a decirles a esos canallas
que ya no nos engañan, que continuaremos protestando hoy, mañana y pasado
mañana, que seguiremos oponiéndonos a la destrucción de nuestra tierra. La
semana pasada presentamos las primeras 500 denuncias ante la Comisión Europea contra
la llamada ley del turismo de las islas verdes. Lo mismo haremos cuando con su
mayoría parlamentaria de 48 votos contra 12 aprueben la Ley del Suelo. Nos
querían sumisos y callados, esperaban un paseo triunfal, pero vamos a aguarles
la fiesta. Ellos tienen el dinero y el poder, pero nosotros tenemos la razón.
No nos pararán.
¡POR LA DEFENSA DE NUESTRA TIERRA!
¡NO A LA LEY DEL SUELO!
Santa Cruz de Tenerife, a 26 de noviembre de
2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario